El pescado en sushi es una proteína excepcional en su forma más pura y simple, lo que convierte a este alimento en un magnífico sustituto de las pechugas de pollo y las latas de atún.

Pensad en los rollitos de sushi como en la comida perfecta culturista, ya que contiene proteína de calidad, carbohidratos complejos y vegetales excelentes, todo en un mismo envoltorio.

Aún escogiendo las calidades más grasientas de pescado -atún y salmón- sigue conteniendo menos de 200 calorías por 100 gramos. Y el pulpo y las gambas todavía bajan de 100 calorías por cada gramos.

El pescado tiene asimismo vitaminas B, ácidos grasos omega-3 y minerales como selenio, potasio y zinc.

¿Te preocupan quizás los productos crudos?

Usar pescado cocido en este caso sirve lo mismo, aunque se pierden algunos nutrientes durante el proceso de cocción.

El arroz del sushi es una fuente excepcional de carbohidratos complejos, y contiene niacina, proteína, tiamina y hierro.

El nori (alga utilizada para cubrir el sushi) es una buena fuente de vitamina C, vitaminas B, iodo, calcio, hierro y proteína.

El gari utilizado para limpiar el paladar ayuda a la digestión.

Muchos supermercados venden pescado preparado para comerse crudo pero ojo con los parásitos. Para salir de dudas lo mejor es congelar el pescado durante una semana a -20 grados.